el puñal delicado
Dijiste NO
y un latigazo me rompió el pecho
un pájaro cayó muerto
y nuestra tierra se alejó del cielo
dijiste NO y sonó como un puñal delicado
restregándose en nuestra utopía
domando nuestra yegua alada
para luego enmudecerla en pedazos
me cuesta tanto escribir
creer para crear el final
el goteo de la desilusión
sobre esta forma única de amar
siento que esta -nuestra historia-
muere sin hacer ruido
que paradoja la que gritó al mundo entero
cuanta razón tenían los profetas de lo cotidiano
Y de las sombras que no quiero ni ver
surge el espécimen único de nuestra mirada
esa que ya se condena a la añoranza
lo que protegíamos por ser sagrada
por ser pequeña
y solo nuestra
me gustaría recuperar mi locura
y mandarla volando a romper tu ventana
querría tragar esos cristales rotos
y sentir de nuevo hasta la nausea